Frente al rebrote del COVID-19 en Europa que desplomó el valor del Brent, Gutiérrez busca reunirse con el secretario Darío Martínez para que Nación reinstaure un precio sostén.

Después de que el Secretario de Energía, Darío Martínez, asegurase que no tiene en carpeta una nueva actualización del barril criollo, crece la presión de las provincias productoras para reinstaurar el precio sostén. Decretada en mayo pasado, la medida quedó sin efecto el 30 de agosto, después de que el Brent operara durante diez días consecutivos por encima de los 45 dólares estipulados por el Gobierno.
Hoy, con un Brent que llegó a pisar los USD37,50, el valor más bajo de los últimos cinco meses, productores y provincias exigen una nueva protección.
Con Neuquén a la cabeza del reclamo a Nación, las provincias refuerzan el pedido y la diferencia de casi diez dólares entre el precio actual y lo estipulado en aquel entonces dificulta aún más la idea de reactivar la producción. En diálogo con el portal neuquino Más Energía, el ministro de Energía provincial, Alejandro Monteiro, dijo que “sin duda que hay condiciones para un precio sostén para el crudo, que quizás en 42 dólares hoy pueden estar bien”.
Y agregó que “los incrementos sucesivos en el valor de los combustibles en surtidor, la reducción de los derechos de exportación, los acuerdos sindicales de los dos últimos meses, tuvieron un efecto que permite generar las condiciones para un nuevo precio sostén”. De seguir el barril en una cifra cercana a los USD37, Neuquén estimó sus pérdidas en $500 millones mensuales.
[ Semana negra para el petróleo: el barril tocó el menor valor en cinco meses ]
En la jornada Energy, Oil&Gas Summit de Forbes, Martínez había señalado que “cuando se dé una tensión más grande entre las productoras, las refinadoras y los gobiernos provinciales, iremos analizando algunas decisiones, pero hoy estamos en valores muy cercanos”.
De este modo, el Gobierno no quiere apresurarse a reinstaurar la medida, aunque sabe que no hay demasiados indicios que indiquen un rebote del precio del petróleo en el corto plazo. Tras las declaraciones de Martínez, Omar Gutiérrez le pidió una reunión con el propósito de estudiar la posibilidad de un nuevo barril criollo, aunque sea a un precio menor al de USD45, tal como sostuvo el ministro Monteiro.
¿Por qué bajó de vuelta el barril de petróleo?
A lo largo de casi sesenta días, el barril se mantuvo en cifras cercanas a los USD 40, sin embargo esa suerte de estabilidad se deshizo en los últimos días, debido a la previsión de lo que todo indica que será una nueva baja en la demanda de petróleo debido al confinamiento estricto al que están volviendo una región considerable del hemisferio norte, principalmente de Europa.
Así como sucedió durante los primeros meses de la pandemia, gran parte del Planeta retorna al escenario de pausa al que conlleva un aislamiento estricto, y la producción hidrocarburífera vuelve a quedar en vilo, a la espera de un nuevo episodio de la demanda en baja.
Las compañías petroleras no quieren saber nada con la sola idea de sumar más problemas a los que ya hay dentro del sector energético. Por lo que vislumbrar un panorama parecido al del segundo trimestre del año sería un golpe difícil de esquivar. El contexto cambiario está lejos de ayudar, la injerencia del dólar en la remarcación de precios ya es historia conocida en la Argentina, por lo que las compañías subrayan la dificultad de seguir afrontando el encarecimiento de los costos.
[ El plan de Darío Martínez para sanear al sector eléctrico ]
Aumento de tarifas: ¿sí o no?
Por otra parte, Martínez dijo que la decisión de dar vía libre a un descongelamiento de las tarifas no está decidida aún y aseguro que dependerá de “la capacidad de pago que tengan los y las argentinas”.
En ese mismo sentido se había expresado, días atrás, Federico Bernal, interventor del ENARGAS, lo que generó ciertas rispideces entre el ente regulador y la Secretaría de Energía, ya que Martínez había puesto sobre la mesa la posibilidad concreta de un aumento de tarifas.
Además, Darío Martínez señaló que “el esquema de subsidios tiene que ser más eficiente”. Según lo que dijo, con un nuevo sistema de subsidios, el Gobierno pretendería llegar a un 40% de la población que no puede pagar el costo real de la energía. En la actualidad, explicó, que apenas un 15% de la gente puede pagar ese costo e insistió en que “la decisión de si después de diciembre van a seguir congeladas o no las tarifas va a depender de la situación en la que esté el país”.