El reclamo salarial de los trabajadores de la salud tomó tal dimensión que las petroleras ya advierten que corren riesgo las metas de producción del Plan Gas.

A raíz de múltiples cortes de ruta con epicentro en la localidad de Añelo y próximos a yacimientos, Vaca Muerta enfrenta uno de los peores escenarios de conflicto gremial en los últimos cinco años. El reclamo salarial del personal de Salud de la provincia de Neuquén derivó en cortes que se reproducen en toda la zona y ponen en pausa a la actividad hidrocarburífera.
Desde hace casi una semana, los cortes tienen lugar en distintas zonas de acceso a Vaca Muerta –a Añelo ya se suman Zapala, Plaza Huincul, Picún Leufú, San Patricio del Chañar, entre otros puntos–, lo que generó el freno a la actividad de perforación o terminación de pozos de más de 30 equipos. Se estima que hay más de mil camiones varados en los accesos a la formación.
Esto no solo significa grandes pérdidas económicas para las empresas, sino que también pone un manto de duda e incertidumbre al cumplimiento de los objetivos de producción estipulados en el Plan Gas de cara al suministro en la época invernal.
Desde la provincia de Neuquén dicen que “este conflicto, que inició como un reclamo de referentes del área de salud, ya dejó de ser un reclamo del área de Salud”. Vanina Merlo, ministra de Gobierno y Seguridad de Neuquén, dijo que “basta con solo tomar contacto con los cortes: de cada 10 personas en los cortes, 8 no son trabajadores de salud”.
A esto la ministra agregó que se trata de “un ataque claro y desestabilizador a la democracia, y al gobierno, a los sindicatos en sus estructuras democráticas y a la economía y que necesitamos que se siga recuperando para que podamos dar un reconocimiento al sector salud”.
“Todo esto repercute en el cumplimiento asumido por las operadoras petroleras con los cupos establecidos en el Plan Gas Ar. El parate implica una pérdida de un millón de metros cúbicos de gas por día”, dijeron a EOL desde una de las mayores petroleras.
“La industria en su conjunto tiene unos 40 equipos parados desde hace seis días, entre perforación, fractura, terminación y asistencia en Vaca Muerta y hay quiebres de stock en 53 estaciones de servicio por imposibilidad de abastecer por el bloqueo de las rutas. Estas pérdidas representan unos 10 millones de dólares sin contar la pérdida futura, que se asocia al retraso en la conexión de pozos”, agregaron.
El gobierno provincial sabe que los reclamos de actualizaciones salariales no sólo provienen de los trabajadores de salud, por lo que pretende actuar con cautela de modo de no sentar un precedente que dispare el reclamo de otros trabajadores del Estado.
Desde Petroleros indican que se conformó una mesa de negociación encabezada por el Fiscal Gerez y los manifestantes, el gobierno provincial y los presidentes de los bloques legislativos. Sin embargo, las negociaciones no avanzan porque el gobierno quiere que levanten los cortes, mientras que los trabajadores que están cortando la ruta quieren un ofrecimiento concreto de plata.
Sumando las problemáticas a las que tiene que hacer frente la industria, en los últimos días Vaca Muerta se transformó en un incordio para el desarrollo de la actividad y que es producto de un caldo de cultivo que escaló muy rápido en poco tiempo.
Ante la consulta de EOL, desde el entorno de Martínez no hubo comentarios. Si bien se trata de un conflicto que atañe al gobierno de la provincia de Neuquén, lo que ocurre en Vaca Muerta termina repercutiendo como no lo hace ninguna otra formación en el plano productivo y comercial de la energía en Argentina.
El reclamo de petroleros
Entre los que reclaman por su salario está el Sindicato de Petroleros Privado que, desde hace largas semanas, es parte de un conflicto con las compañías y que hoy permanece en el desacuerdo entre ambas partes y que ya tienen en su haber amenazas de paro por parte del gremio. Su reclamo es el de un ajuste al 15% otorgado de paritarias del año pasado. En el gremio están atentos a cómo se resuelve este conflicto con el personal de Salud, con un ojo en el reclamo salarial propio que están encabezando.
[ Pereyra eleva la confrontación y vuelve a insistir con las paritarias del 2020 ]
Del otro lado del mostrador, los directivos de las compañías buscan reanudar el diálogo con el sindicato de modo de lograr un acuerdo cuanto antes y así evitar un escenario similar al actual.
La figura de Pereyra
Como trasfondo de todo, comienza a resonar al anuncio de retiro de Guillermo Pereyra al frente del Sindicato de Petroleros Privados de Río Negro, Neuquén y La Pampa. Tras sus palabras, algunas voces hacen referencia a la idea de una suerte de poder descabezado que hoy reina en el sindicato ante la noticia anunciada por su titular.
“La industria ahora se da cuenta de cómo Pereyra mantenía un delicado equilibrio entre todas las fuerzas que estaban contrapuestas. Al desaparecer Pereyra de escena como pacificador, entra en una especie de caos” dice el analista de mercado Francisco Uriburu. Además, considera que “él manejaba todos los reclamos, desde los mapuches hasta cualquier conflicto gremial y era el nexo entre el gobierno, empresas y sindicatos. Esto preocupa mucho al mercado porque estábamos en un momento bisagra con un boom de actividad”.
[ Pereyra anunció su retiro de la conducción gremial de los petroleros tras 40 años al frente ]
En esta misma línea, desde la provincia de Neuquén señalan que “sin Pereyra todo se va a volver más inestable gremialmente. Pereyra era garante de la paz social en los yacimientos”.